NUEVO TRATADO PANDÉMICO: PARA LAS ORGANIZACIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL ES INSUFICIENTE Y PARA INDUSTRIA FARMACÉUTICA MULTINACIONAL ES PELIGROSO

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Más de dos centenares de organizaciones de la sociedad civil advirtieron que el “borrador cero” del nuevo tratado pandémico de la OMS necesita más énfasis en la prevención y compromisos sólidos de los gobiernos y de la industria farmacéutica para compartir medicamentos, terapias y tecnologías.

Al mismo tiempo, la industria farmacéutica multinacional cuestionó el borrador porque avanza sobre la exención de los derechos de propiedad intelectual.

Las negociaciones entre los Estados miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el borrador comenzarán en la cuarta reunión del Órgano de Negociación Intergubernamental (INB), programada del 27 de febrero al 3 de marzo.

Solo los Estados miembros participarán en las negociaciones reales del Tratado, que comenzarán a puerta cerrada el segundo día de la reunión, explicó el copresidente del INB, Roland Driece.

Mientras tanto y en una consulta previa convocada por la OMS, alrededor de doscientas ONG coincidieron que el borrador debe prestar más atención a la prevención y que debe expresar medidas concretas y compromisos sólidos en vez de invocaciones voluntarias.

“Esto significa abordar los factores sociales, ambientales y de seguridad alimentaria que conducen a la propagación de patógenos de las poblaciones de animales salvajes a las comunidades humanas”, resumió Health Policy Watch.

Oxfam, que también representó a la Alianza Popular para las Vacunas, dijo que "el lenguaje del acuerdo debe obligar a los gobiernos a tomar medidas específicas para garantizar la equidad; de lo contrario, sería muy difícil implementar esto".

El borrador cero también asume que "las intervenciones críticas de salud pública se basan en la voluntad de las compañías farmacéuticas de participar en mecanismos voluntarios", pero "estos han demostrado ser en gran medida insuficientes durante las pandemias actuales y anteriores", lamentó Piotr Kolczynski, de Oxfam y PVA.

Por esta razón, agregó, "el acuerdo debe exigir a los gobiernos que inviertan en capacidades de investigación y desarrollo y fabricación y que condicionen la financiación pública al intercambio de tecnologías, conocimientos y propiedad intelectual con desarrolladores y fabricantes en el Sur".

En referencia a la propuesta del acuerdo de que el 20% de los bienes relacionados con la pandemia se asignen a la OMS para su distribución, Oxfam declaró que "la asignación equitativa de contramedidas médicas no se puede lograr reservando un 20% de la producción para el 80% de la población mundial".

Médicos sin Fronteras (MSF), por su parte, pidió una definición legal de "pandemia" y "una referencia explícita a los gobiernos que cumplen con las obligaciones del derecho internacional humanitario en el contexto de la preparación, prevención y respuesta ante una pandemia".

También exigió “un lenguaje más fuerte en relación con los compromisos” para proteger a las "poblaciones humanitarias preocupadas" y a los trabajadores de la salud durante las pandemias.

"El sector privado debe ser visto como un socio crítico en la preparación, respuesta y recuperación, y debe tener un asiento en la mesa", expuso la Federación Internacional de Fabricantes y Asociaciones Farmacéuticas (IFPMA).

Sin embargo, advirtió que algunas de las propuestas del acuerdo "pondrían en peligro nuestra capacidad de prepararnos eficientemente para la próxima pandemia". Entre las principales preocupaciones que citó figuraban las propuestas de exención de los derechos de propiedad intelectual para los productos sanitarios durante una pandemia.

También instó al INB a "evitar superposiciones y duplicaciones innecesarias, incluido el mandato y la experiencia de otras organizaciones multilaterales, como la OMC y la OMPI".

La Wildlife Conservation Society (WCS) recomendó que el acuerdo comprometa a los gobiernos a "identificar y priorizar acciones para prevenir el contagio de patógenos en primer lugar" adoptando regulaciones más estrictas sobre "mercados y cadenas comerciales y comercio de vida silvestre nacional e internacional".

"Tenemos una amplia experiencia y conocimientos con la degradación del hábitat, la deforestación, la degradación forestal, el comercio de vida silvestre y los mercados de vida silvestre", dijo el representante de WCS.

"Y esto no se trata de comercio ilegal, se trata de cualquier comercio vivo, particularmente para alimentos, pero también para otros fines, aves y mamíferos. Esperamos con interés trabajar con los Estados miembros y el INB para garantizar que, ante todo, los gobiernos se comprometan a evitar el desbordamiento en primer lugar. Y sabemos cómo hacerlo, desde una perspectiva de biodiversidad y en términos de mercados".

El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) hizo un llamamiento para que la "lista de impulsores de los riesgos de aparición de patógenos se amplíe para incluir no solo la deforestación, sino también la pérdida, fragmentación y degradación de los ecosistemas".

"La deforestación por sí sola omite muchas de las fronteras pandémicas potencialmente importantes e ignora el papel de la fragmentación y la degradación en la creciente proximidad entre los humanos y la vida silvestre", alertó WWF.

Mientras tanto, la Organización Mundial de Sanidad Animal (WOAH) pidió la inclusión de la definición completa de "Una sola salud" en el tratado.

Su delegado también preguntó por qué se hacía hincapié en la preparación y la respuesta y no en las "medidas preventivas dirigidas a actividades y lugares que aumentan el riesgo de propagación zoonótica".

La OMS se propone presentar el nuevo Tratado Pandémico en mayo de 2024. durante la Asamblea Mundial de la Salud.