DIPUTADOS AVANZA CON GENERICOS

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El proyecto que elimina la opción de la marca comercial en la Ley de Prescripción de Medicamentos por su Nombre Genérico obtuvo el dictamen favorable de las comisiones de Salud y Defensa del Consumidor que sesionaron juntas y sin la presencia de los legisladores de Cambiemos. Ahora y por primera vez en años, el proyecto está en condiciones de ser tratado en el recinto, aunque el oficialismo anticipó su rechazo.

Las comisiones de Salud presidida por Carolina Gaillard (FPV) y de Defensa del Consumidor  encabezada por la diputada Liliana Shwindt (FR), consiguieron sanción para el proyecto que en su versión original había presentado la legisladora Gloria Bidegain (FPV) en 2014 y que ese año también  había conseguido dictamen favorable en Salud, pero no así en Defensa del Consumidor.

“Es imprescindible garantizarle a la población el acceso a medicamentos más económicos, seguros y de calidad”, expresó Carolina Gaillard, en la apertura del plenario conjunto que duró cuatro horas y sirvió para que expusieran diputados,  farmacéuticos, académicos, médicos y algunos voceros de la  industria.

La industria, precisamente, estuvo representada solo por Cooperala, ya que CILFA y CAEME declinaron el debate. También participó la cámara de de medicamentos genéricos, CAPGEN, obviamente para defender el proyecto.

Gaillard anunció que habrá otras dos reuniones convocadas por la comisión de Salud para analizar el mercado farmacéutico argentino y el precio de los medicamentos.

La audiencia pública por el precio de los medicamentos convocada en conjunto con las comisiones de Salud, Comercio y Defensa del Consumidor, será el 25 de abril.

Durante el debate hubo algunos cruces dialécticos interesantes que levantaron el nivel profesional y académico del debate. Especialmente entre el presidente de Cooperala,  Hugo Caivano,  y Constantino Touloupas,  médico farmacológico de la Universidad de  La Plata y entre Caivano y los farmacéuticos del Colegio de Capital Federal, como así también entre Touloupas  y Mario Domínguez, del Laboratorio de biotecnología que lleva su nombre.

El debate se tensionó cuando  Domínguez afirmó que “había que levantar la alfombra y ver que hay debajo”, mencionando la “confusión entre originales, similares de marca y genéricos intercambiables”.

“El 70 por ciento de los medicamentos que hay en el mercado no han demostrado ser eficaces ni seguros”, aseguró Domínguez, aclarando que no solo hablaba solo de genéricos sino también de medicamentos de marca.

Caivano aclaró que los exámenes de bioequivalencia fundamentales para aplicar una política basada en medicamentos genéricos provocaría “un aumento de costos  y de precios”, además de que “no hay en Argentina centros de bioequivalencia en cantidad y calidad”.

“La ANMAT acepta la bioequivalencia de la India sobre la que no tiene control”, advirtió Caivano. Y que la prescripción por genéricos demandará “más farmacéuticos en las farmacias y menos empleados de farmacia”.

También  afirmó que existe “cierta fantasía sobre el precio de los genéricos y el PAMI”.

Rubén Sajem, Presidente Sección de Farmacéuticos del Colegio de Farmacéuticos y Bioquímicos de CABA, sostuvo que “el paciente tiene derecho a elegir sus medicamentos. Esta no es una pelea con la industria, sino que es una modificación que revaloriza la profesión de los farmacéuticos y de los médicos. Debemos procurar que las recetas sean un instrumento científico y no un instrumento comercial”.

Claudio Ucchino, Presidente del Colegio de Farmacéuticos y Bioquímicos de CABA, agregó que “esta ley es superadora, y hay que dejar las mezquindades de lado.  Hay pacientes que no pueden acceder a los medicamentos y quedan fuera del sistema. Existen diferencias de precios entre laboratorios y nosotros tenemos la capacidad y la formación para acompañar al paciente a la hora de adquirir sus medicamentos”.

“Debemos asegurar el derecho de la gente a la salud trabajando en equipo y no es nuestra intención como interpretaron algunos médicos, la prescripción”,  agregó Ucchino.

El profesional comparó que el mercado de genéricos en Estados Unidos es del 68 por ciento, el Reino Unido del 78 por ciento y en España del 54 por ciento.

En cambio, en  Argentina un estudio de la COFA reveló que entre el 2010 -2014 los genéricos solo ocupan el 4% del total del mercado en unidades, completó.

Constantino Touloupas, médico especialista en Farmacología Clínica agregó que “las modificaciones que se proponen son pertinentes, legales y no alteran ni el rol del médico ni el del farmacéutico. El paciente será un sujeto activo con capacidad para elegir”.

“Argentina no tiene genéricos y es mejor así porque puede ocurrir como en España que se los usó para oligopolizar el mercado”, advirtió Touloupas.

 José Charreau, miembro de la conducción nacional de la AAPM, (visitadores médicos) sostuvo que la cuestión de fondo en el mercado farmacéutico argentino no son los medicamentos genéricos, los similares o los originales, sino la carencia de regulaciones de precios y de la publicidad engañosa.

“Los genéricos no existen en Argentina porque en definitiva todos venden genéricos de marca: Roemmers, Elea, Gador…que compran la misma materia prima en  India y que llega en barriles”,  enfatizó Charreau.

Los representantes de CAPGEN denunciaron a su vez que “estamos excluidos del PAMI” y el Ministerio de Salud debería ser  “más activo en este tema” porque “los concursos públicos evidencian las diferencias de precios”.

Raúl De los Santos, vicepresidente de la Academia Nacional de Medicina, también aportó una visión crítica y pidió “reflexionar sobre los cambios en la ley”, remarcando que se expresaba como “la voz del paciente”.

“¡Cuidado a la restricción absoluta!, que el paciente no tenga que peregrinar entre el médico y la farmacia con un receta en la mano. Que ninguna medida se vuelva contra el  paciente”, pidió el representante de la Academia Nacional de Medicina.

El derrotero del proyecto en Diputados es incierto ya que el legislador Sergio Wisky (PRO), vocal de la comisión de Salud, anticipó que presentó un dictamen en rechazo al texto consensuado por la oposición  durante el plenario de comisiones.

Wisky analizó que "seria redundante hacer esta reforma porque ya está contemplado en el artículo 7 de la ley de genéricos aprobado en el 2002".