Un medicamento de uso para animales ha sido declarado “amenaza emergente” en Estados Unidos al causar miles de muertes de personas. Se trata de la Xilacina que es un tranquilizante no opioide.

La Xilacina ha sido aprobada por la FDA para uso veterinario, pero no para uso humano.

La Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos ha informado que entre 2020 y 2021 las muertes por sobredosis de Xilacina aumentaron un 1.127 % en el sur del país y un 750 % en el oeste.

La Xilacina es un sedante animal que se ha utilizado cada vez más como droga ilícita en los Estados Unidos. 

Los efectos secundarios incluyen mareos, náuseas, vómitos, hipertensión arterial, bradicardia y depresión respiratoria.

El consumo de Xilacina está complicando los esfuerzos para revertir las sobredosis de opioides, amenaza con la que Estados Unidos lleva lidiando durante años

La Xilacina se ha mezclado con el fentanilo, un derivado del opio. Este es un fármaco muy usado como analgésico que tiene una potencia 40 veces superior a la heroína y 100 veces mayor que la morfina, se ha convertido en una de las peores drogas en Estados Unidos y en una nueva epidemia.

Rahul Gupta, director de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca, ha designado oficialmente al fentanilo adulterado o asociado con Xilacina como una "amenaza emergente" para Estados Unidos.

“Como médico, estoy profundamente preocupado por el impacto devastador de la combinación de fentanilo y Xilacina, y como asesor de políticas de drogas del presidente Biden, estoy inmensamente preocupado por lo que significa esta amenaza para la nación”, ha expresado Gupta.

 “Al declarar la combinación de Xilacina con fentanilo como una amenaza emergente, estamos siendo proactivos en nuestro enfoque para salvar vidas y crear nuevas herramientas para funcionarios de salud y seguridad públicas. A aquellos afectados por el uso de Xilacina: quiero que sepan que la ayuda está en camino”, prometió el funcionario.

La designación de “amenaza emergente” se produce después de una cuidadosa revisión del impacto de la Xilacina en la crisis de los opioides, incluido su papel cada vez mayor en las muertes por sobredosis en todas las regiones de Estados Unidos.

Gupta completó que "el fentanilo era peligroso antes y lo es aún más ahora debido a su combinación con la Xilacina. Abordar la crisis del fentanilo también requiere abordar las drogas, en particular la Xilacina, con las que se combina el fentanilo”.