ACUERDO ARGENTINA-USA Y LA REPERCUSIÓN EN EL SECTOR FARMACÉUTICO
El nuevo entendimiento comercial sellado entre Argentina y Estados Unidos abrió expectativas dentro del sector farmacéutico local. Mientras distintos actores evalúan cómo podría reordenarse el mercado, CILFA la cámara que agrupa a los laboratorios de capital nacional expresó su punto de vista: “Los anuncios se refieren a las bases para un acuerdo marco cuyo contenido completo se conocerá con el texto final del acuerdo. En consecuencia, hasta que ello ocurra, será difícil prever sus impactos en el sector”.
Desde la entidad insistieron nuevamente en la necesidad de un marco equilibrado: “Estamos a favor de un acuerdo comercial que promueva el comercio y la inversión, en términos de reciprocidad en materia de regulación sanitaria de productos farmacéuticos, y que fije las bases de una mayor competencia, acceso a medicamentos y una propiedad intelectual balanceada”. A la vez, remarcaron que cualquier análisis definitivo dependerá estrictamente de la “letra chica” del convenio, cuyo contenido se conocerá con el texto final del acuerdo.
El entendimiento —firmado por los gobiernos de Donald Trump y Javier Milei— sienta las bases para una mayor apertura bilateral: reducción de aranceles, estándares regulatorios compartidos y reglas comunes para sectores estratégicos, entre ellos el farmacéutico. Para Washington, se habilitará un canal preferencial de ingreso para medicamentos, dispositivos médicos, maquinaria, tecnologías de la información y diversos insumos industriales; mientras que Argentina obtendrá la baja o eliminación de aranceles estadounidenses sobre bienes vinculados a recursos naturales y productos farmacéuticos no patentados.
En este escenario, fuentes de la industria local remarcan el rol del complejo farmacéutico como generador de empleo calificado, exportaciones de alto valor e innovación tecnológica, con inversiones sostenidas en biotecnología e infraestructura productiva. Actualmente, el país se destaca por su creciente presencia en mercados externos, con exportaciones que superan los USD 1.200 millones, además del fuerte impulso de los biosimilares, que proyectan un ahorro cercano a USD 5.000 millones en los próximos cinco años y sostienen más de 3.000 empleos en plantas biofarmacéuticas locales.
Qué implica el acuerdo para los laboratorios internacionales
Los laboratorios transnacionales, nucleados en la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (CAEMe), celebraron el entendimiento como un avance hacia reglas más previsibles y alineadas con estándares globales. La entidad sostuvo que el acuerdo facilita una mayor compatibilidad con los sistemas regulatorios de referencia —incluyendo los criterios de la FDA— reduciendo trámites duplicados y acelerando la llegada de innovación al mercado argentino.
Además, CAEMe valoró especialmente el compromiso bilateral de reforzar la propiedad intelectual, incluyendo la adecuación a pautas internacionales señaladas en el reporte Special 301. Desde su perspectiva, esto contribuiría a un entorno más favorable para la inversión en I+D, la transferencia de tecnología y el desembarco de nuevos medicamentos.